318. Historias para aprender español: El director
Crónicas de Málaga: una cerveza de más y el drama familiar de un viajero 🤯🇪🇸
¡Bienvenid@s a una nueva entrega de «Cuéntame», las historias cortas que os traen el español de la vida real! En el episodio de hoy, nuestro estudiante Jan vive una tarde de negocios, fútbol y… ¡un gran susto familiar!
Citas de negocios en Málaga: salmón, cervezas y «La Fábrica» 🍻
Nuestro protagonista, que es un «buen cliente» de la escuela, es invitado a almorzar por el director y dueño de la misma, Connor, un hombre irlandés.
Eligen «La Fábrica», un restaurante que antiguamente era una cervecería y que está en la misma calle que la escuela. Ambos piden salmón. Connor lo acompaña con una cerveza, mientras que nuestro estudiante opta por un agua con gas.
Conversan sobre las novedades de la escuela y las experiencias del estudiante en otros centros. Connor pide otra cerveza, el estudiante, más agua con gas (¡tenía planes de hacer deporte por la tarde!).
El drama de llamar a papá y mamá: ¡España es peligrosa! 📞😰
La conversación cambia a temas personales. Connor habla de su familia en Dublín y Jan, de su padre enfermo. El estudiante confiesa que tiene una rutina: llama a sus padres todos los días, no solo por su padre, sino para tranquilizarlos. Explica:
«Piensan que España es muy peligrosa, que aquí se dedican a robar a los turistas a diario y luego a asesinarlos o viceversa. Y especialmente cuando caminas solo por la calle, si ya está oscuro.»
Para que sus padres «puedan volver a dormir del tirón por la noche», Jan debe llamarles a diario para confirmar que «no ha sido robado ni asesinado». ¡Pobre viajero!
Cuando el deporte te arruina la tarde (y la noche) ⚽🍺
La inmensa televisión del restaurante capta su atención. Un partido del Mundial de Qatar está a punto de comenzar: Croacia vs. Bélgica. Son las 4:00 PM.
Connor, a gusto, pide otra cerveza. Jan decide que quizás puede «dejar el deporte para mañana» y se pide una cerveza también: «Venga, ponme una cerveza», pide al camarero.
A pesar de que el partido no es interesante, la compañía es buena. El tiempo vuela, ven parte del partido Japón vs. España de las 8:00 PM, pero Jan no sabe cómo termina… Nuestro protagonista confiesa que se va a casa con un «pelotazo de tres pares de narices» (una expresión coloquial para referirse a una borrachera muy fuerte).
Se lanza a la cama sin desvestirse. La noche es un caos de «retorcimiento» (dolor de estómago), «visitas al baño» y «zumbidos» que parecen el despertador del vecino.
«Juro que nunca más saldré con ese irlandés.»
El desenlace: el teléfono suena a las 5:00 AM 🚨
De repente, a las 5:00 AM, el teléfono lo despierta «sobresaltado». Era su hermano:
«Joder, llama a tus padres inmediatamente. Están muy, pero que muy preocupados.»
Jan se da cuenta que tiene 29 llamadas perdidas y decenas de mensajes. Después de la llamada, con sus padres «llorando», no consigue dormir de nuevo.
La lección aprendida y la decisión de hacer pellas 😣
A la mañana siguiente, decide «hacer pellas» (una expresión para saltarse o faltar a clase) debido a su tremendo dolor de cabeza y al «nudo en el estómago». Por suerte, no tendrá que dar excusas a Connor… ¡aún!
¿Y tú? ¿Cuál es tu experiencia más dramática o divertida con las resacas en el extranjero? ¡Cuéntanoslo en los comentarios!
🤓 Aprender español con historias reales
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