Costumbres de los países en Navidad

Julbock

En el siglo XVII, en los países nórdicos como Suecia, existía una cabra, o julbocken, traducido como “cabra de Navidad”. Los jóvenes de los pueblos hacían obras de teatro donde la cabra representaba el personaje malo, pero pasado el tiempo, ya en el siglo XIX, la cabra pasó de ser el malo a regalar a los niños.

Según cuenta la leyenda, el Dios del Trueno, Thor, sacrificó a las cabras que tiraban de su carro para dárselas a otros dioses. Sin embargo, se arrepintió y las devolvió a la vida.

Desde 1966 se creó una nueva costumbre, en la ciudad sueca de Gävle se construyó una cabra gigantesca de mimbre, de hasta 16 metros de altura. Durante la época navideña, las fachadas de las casas se llenan de figuras de cabras de paja, en lugar de las clásicas botas de Santa Claus. También es tradición, o una broma, que la cabra sea quemada cuanto antes. Algunas cabras han durado días o semanas, y otras no han aguantado ni 24 horas.

Otra curiosa tradición sueca es la emisión de una hora de capítulos del pato Donald. Desde 1959 el país escandinavo se reúne el 24 de diciembre a las 15h para ver los episodios del famoso pato de Disney.

Abrir puertas y ventanas

En Rusia es costumbre abrir puertas y ventanas para crear corriente y así dejar salir los malos espíritus y los buenos pueden entrar libremente. Esta tradición también ha llegado a países como Italia o Bulgaria.

Vestirse de lunares

Filipinas es un país muy supersticioso. Su cultura y tradición popular lleva años asegurándose de que se cumplen las antiguas tradiciones que les proporcionará buena fortuna y prosperidad.

Por ejemplo, en Nochevieja se visten con ropas de lunares. Esto se debe a que para ellos las formas redondas son símbolo de felicidad y suerte, cuyo imaginario puede venir de la forma de las monedas. Zapatos, bolsos, camisas, vestidos, no importa qué prenda se lleve mientras sea de lunares, y si pudiera ser que lleve un bolsillo, para meter monedas. Así, cuando el reloj toca las 00:00, se hace sonar el dinero para ahuyentar a los malos espíritus y comenzar el nuevo año.

Comer lentejas en Año Nuevo

Esta peculiar tradición se remonta hace siglos en la Antigua Roma., cuando los romanos por estas fechas regalaban una pequeña bolsita de cuero llena de lentejas. La analogía que representaba, es que a lo largo del año el deseo era que esas lentejas se convirtieran en monedas. Es por ello que a las 00:00, tras felicitarse el año y haber cenado, en Italia se toma un plato de lentejas.

El pavo y el beso

En Estados Unidos, el pavo es un alimento que se toma en Navidad pero sobre todo en Acción de Gracias, o Thanksgiving Day. También, para ellos es muy importante dar un beso justo cuando son las 00:00 para tener suerte en el amor durante el próximo año.

Las maletas

En algunos países como Rumanía o en Latinoamérica como Perú, Panamá y Colombia, tienen la costumbre de hacer y deshacer las maletas en el mismo día de Año Nuevo. E incluso dar una vuelta a la manzana de donde viven con la maleta para cumplir el propósito de viajar más.

12 platos caseros

En Polonia es tradición hacer un gran festín para la cena de Nochebuena. El nombre que le dan en polaco es Boże Narodzenie, «el nacimiento de Dios». Es un momento en el que se reúne toda la familia y según la tradición, empieza con la primera estrella que aparece en el cielo.

En el menú no se toma carne y la cena empieza compartiendo el oplatek, una oblea con forma rectangular con imágenes navideñas con la que se desea salud y prosperidad. Después continúan 12 platos elaborados, entrantes como arenques en aceite, pierogi (empanadillas) que se rellenan con queso y patata, o chucrut y setas. Prosigue con sopas, que puede ser de remolacha con raviolis de setas, o de setas del bosque. Después llega el plato principal: la carpa. Se cocina frita, pero también en gelatina o en salsa. Otras opciones de pescados suelen ser merluza o trucha.

Para el postre hay una gran variedad de alimentos, como makowiec, un pastel enrollado de crema de semillas de amapola; las łamańce, galletas que se untan con crema de semillas de amapola; los pierniki, galletas de jengibre con formas; y sernik, una tarta de queso.

Romper vajillas

Una tradición de Dinamarca es romper los platos contra la puerta de tus seres queridos después de la cena de fin de año. El que tenga más platos rotos tendrá mayor suerte durante el año. Otra costumbre que se hace consiste en saltar de una silla en el momento en el que se pasa al año siguiente.